martes, 27 de mayo de 2014

Cómo superar la soledad emocional

La soledad emocional se refiere a ese estado en el que interiormente nos sentimos vacíos, tal vez haya gente a nuestro alrededor, quizá incluso nuestra vida social esté repleta de amigos y conocidos con quienes compartir el tiempo o actividades pero esto no siempre es  suficiente para cubrir esa soledad.

A veces cuesta entender esta situación desde fuera, es muy típico que te digan “si tienes gente a tu lado”, “no tienes motivo para quejarte”… estos comentarios pueden hacerte sentir aún más lejos de tu entorno, más solo e incomprendido. Y es que es frecuente entender la soledad como algo más físico, esa soledad en la que no se tienen relaciones sociales o apoyos, sin embargo, es muy común que en algún momento de nuestra vida pasemos por un período en el que nos sintamos atrapados por esta soledad emocional.

¿Y qué hacer para superar la soledad emocional?
  •  Lo primero de todo siempre es identificar esta emoción, darnos cuenta de qué nos pasa, de que ese malestar se debe a una soledad no física sino emocional. Identificar un problema es siempre el primer paso para resolverlo.
  • Una vez identificado esto conviene dedicarnos un tiempo, reflexionar, pensar qué mensaje nos está dando esta soledad. Nuestras emociones nos hablan, escucha qué te está diciendo esta soledad, tal vez haya pasado algún hecho significativo en tu vida al que necesites dedicarle tiempo, quizá algún hecho del pasado quedó sin resolver y necesitas solventarlo o puede que hayas perdido relación con alguien importante en tu vida… Los motivos pueden ser muchos y muy variados, atiende a ese mensaje.
  • No siempre disfrutamos con otras personas y es que primero tenemos que aprender a disfrutar de nuestra soledad. Si no disfrutamos con nosotros mismos en nuestra soledad nos será muy difícil disfrutar con los demás. Aprovecha el tiempo que estés sólo, piensa en hacer algo que te apetezca, con lo que disfrutes y no necesites a nadie, reencuéntrate desde el disfrute en la soledad.
  •  Aunque en muchas ocasiones a nuestro entorno le cuesta entender qué nos pasa, apóyate en tu gente, busca esa figura segura que te escuche. Nadie te dará la solución, pero sí ese apoyo con el que compartir tu malestar, descargar. Cuando guardamos nuestras preocupaciones para nosotros mismos la intensidad con la que vivimos este malestar crece desmesuradamente. Y a la inversa, cuando compartimos nuestras preocupaciones nos sentimos más aliados, la preocupación disminuye. No lo dudes, busca con quien compartir  tus problemas.
  •  No esperes a que los demás vengan a ti, tendemos a quejarnos del comportamiento de los demás, de cómo hacen su vida y no se preocupan por nosotros. Probablemente los demás estén pensando igual que tú, si tienes necesidad de los demás no esperes a que vengan a ti, ve tú. Seguro la otra persona te recibe con ilusión y se alegra de que hayas recurrido buscando su ayuda.
  • No olvides cuidar tu autoestima ya que esta es la primera que se ve afectada cuando no nos sentimos bien. No te machaques, permítete un tiempo con esta soledad, escucharla y conocerla para poderla superar. Mandarte mensajes negativos no te va a ayudar así que intenta no tomarte esta fase como un golpe de autoestima sino un bache a superar del que puedes salir reforzado.

Descubrir el problema de la soledad emocional no es algo fácil pues nos vemos ante la incoherencia de no estar solos físicamente pero sí sentirnos solos emocionalmente y  requiere dedicar tiempo y esfuerzo a ver qué está causando este sentimiento. Pero todo es superable y si te enfrentas a este momento podrás resolverlo y, como decía, salir reforzado creciendo como persona.

Mª Isabel Naranjo
Psicóloga y Terapeuta familiar y de pareja


lunes, 26 de mayo de 2014

Oferta primavera y verano 2014 en Agencia Matrimonial Cyclo




Si eres mujer, tienes menos de 36 años y actualmente no tienes pareja... apúntate a nuestros servicios con importantes descuentos. 
Te ofrecemos un trato muy personalizado, realizando presentaciones con perfiles de calidad.


No pierdas esta oportunidad y encuentra pareja¡¡

martes, 13 de mayo de 2014

Sin miedo a enamorarse

Todo ser humano tiene el deseo de enamorarse, “que alguien se fije en mí, me desee, me quiera…” pero, ¿qué pasa realmente cuando llega ese momento?

Que el amor llame a nuestra puerta suele ser un hecho que se recibe con ilusión y a la misma vez con miedo ¿y si me enamoro?, ¿y si sale mal?, ¿y si finalmente no le gusto?... el miedo a enamorarse es algo bastante común en el ser humano ya que enamorarnos nos deja en una situación de vulnerabilidad en la que lo que sentimos no podemos controlarlo sino que más bien el sentimiento nos domina a nosotros mismos.

Por ello, cuando conectamos con alguien pueden pasarnos dos cosas, que ese feeling vaya más allá, nos enamoremos y nos dejemos llevar o que ese feeling  nos empiece a atemorizar y, movidos por el miedo, nos alejemos de la persona o enfriemos la relación como una manera de protegernos.

Los expertos hablan de filofobia, a la cual denominan como una alteración del estado de ánimo que hace que la persona tenga dificultad para enamorarse o comprometerse en una relación. El miedo en esta situación es el protagonista.

Desde mi punto de vista, me gusta más enfocarlo como una dificultad que tiene la persona, ya sea por una mala experiencia pasada, un aprendizaje de su entorno, miedo a sufrir un desengaño… Las causas pueden ser múltiples pero la realidad es que la persona sufre por esta dificultad que puede ser superada.
Lo más común es que la persona que tiene miedo a enamorarse, huya y evite los momentos en los que el feeling, el enamoramiento o el compromiso pueden ponerle en una postura incómoda.

¿Qué puedo aconsejarte? Lo primero de todo decirte que no eres la única persona a la que le pasa esto, este miedo es muy común. Todos tenemos alguna dificultad como personas y esta dificultad es superable. Quizá necesitas ir muy poco a poco cuando sientas que te estás enamorando de alguien y ese alguien de ti, comentarlo con esta persona te ayudaría a que lo comprendiera y a que, si está dispuesta, se ajuste al tiempo y velocidad que tú necesitas. Queda en sitios en los que te sientas seguro/a, en los que el ambiente, la actividad o el lugar físico te hagan estar más cómodo/a. Da pequeños pasos y ve aumentando la frecuencia, intensidad y duración de las quedadas con esta persona cuando te sientas preparado/a.


A veces, es complicado manejar estas situaciones por nosotros mismos. Si te sientes perdido para manejar tu miedo a enamorarte un apoyo psicológico podría ser ese soporte que necesitas para superar tu miedo y disfrutar satisfactoriamente del amor en compañía de quien desees.

Mª Isabel Naranjo
Psicóloga y Terapeuta familiar y de pareja